Cada tanto aparecen imágenes
en mi cabeza. De nosotros.
Fotografías de aquella noche
que los dos juntos compartimos.
Tengo un mapa en mi memoria
de tus caricias y tus besos,
como me tomabas con tus manos
y me hacías esclava de tus respiros.
Tus labios bailaban por mi cuello,
mis hombros y mi espalda.
Con cada uno de esos besos
yo conocía una estrella diferente.
Sentí un relámpago en el alma
cuando me abrasaste fuerte,
piel contra piel, esa sensación única y característica tuya.
Escuchaba tu aire, y me mirabas a los ojos.
Me leías completamente solo al verme,
no era necesario decirte lo bien que me sentía.
Esa noche ya pasó, ya no siento tu respiración.
Ni tus latidos que iban al mismo ritmo que el mio.
Y ahora, que ya no estas sosteniéndome entre tus brazos,
necesito sentirte de nuevo.
en mi cabeza. De nosotros.
Fotografías de aquella noche
que los dos juntos compartimos.
Tengo un mapa en mi memoria
de tus caricias y tus besos,
como me tomabas con tus manos
y me hacías esclava de tus respiros.
Tus labios bailaban por mi cuello,
mis hombros y mi espalda.
Con cada uno de esos besos
yo conocía una estrella diferente.
Sentí un relámpago en el alma
cuando me abrasaste fuerte,
piel contra piel, esa sensación única y característica tuya.
Escuchaba tu aire, y me mirabas a los ojos.
Me leías completamente solo al verme,
no era necesario decirte lo bien que me sentía.
Esa noche ya pasó, ya no siento tu respiración.
Ni tus latidos que iban al mismo ritmo que el mio.
Y ahora, que ya no estas sosteniéndome entre tus brazos,
necesito sentirte de nuevo.